jueves, 4 de septiembre de 2014

Más selva

Me ha marcado bastante leer acerca del trabajo de algunas personas con los nativos indígenas en la amazonía. Siempre pensé que la llegada arrasadora del hombre blanco, sus máquinas petroleras y madereras era lo peor que les podía pasar a los nativos. Pero el intento de implantación de la religión católica y de la educación no se ha quedado atrás en la infame historia de la destrucción de otros pueblos.
Ya será demasiado tarde, pero ojalá los cruzados de la fe, los educadores al modo occidental y los especuladores se hubiesen quedado en sus casas y nunca hubiesen llegado y destruido otras culturas.
Me quedo con las palabras del padre Juan Marcos, que llegó en los años 70 a la amazonía peruana para evangelizar, y fue evangelizado...

"A veces pienso que he arado en el mar, que la educación, tal como la entendemos en occidente, ha sido lo peor que les pudo pasar a los indígenas... Todo se volvió una lucha contra la corriente: la educación a la manera occidental insiste en instalarse en estas tierras y unificar el pensamiento, el idioma, la palabra. Pretende acabar y borrar sus raíces, su conocimiento, su manera de vivir y volvernos a todos la misma cosa, sin respetar diferencia alguna. A veces creo que la letra, que la educación a la manera occidental y de conquista, se ha hecho para humillar a aquellas culturas que no la tenían."

       Milagros Aguirre, La Utopía de los Pumas.